¿Quién usa aún PopSockets? Mira las alternativas
Los PopSockets son unos accesorios que se han vuelto muy populares entre los usuarios de smartphones.
Se trata de unos pequeños discos que se adhieren a la parte trasera del teléfono o de la funda, y que se pueden expandir y contraer para facilitar el agarre, el uso y el transporte del dispositivo.
Además, los PopSockets sirven para otras funciones, como usarlos como soporte para ver vídeos, cambiarlos por otros accesorios como carteras o cargadores inalámbricos, o personalizar el aspecto del teléfono con diferentes diseños y colores.
Más de una década de historia
La historia de los PopSockets se remonta al año 2012, cuando David Barnett, un profesor de filosofía, buscaba una solución para enrollar sus auriculares sin que se enredaran. Se le ocurrió pegar dos botones a una funda de iPhone 4, y añadir un mecanismo para que se pudieran expandir y contraer
Así nació el primer prototipo de PopSocket, que Barnett presentó en una campaña de Kickstarter para recaudar fondos y producirlo a mayor escala.
Sin embargo, el camino hacia el éxito no fue fácil para Barnett. Tuvo que enfrentarse a varios obstáculos, como la cancelación de un acuerdo de licencia con una empresa de fundas, la demora en la entrega de los productos a los patrocinadores de Kickstarter, o la dificultad para entrar en el mercado de los accesorios para móviles.
No fue hasta 2014 cuando empezó a vender los PopSockets en su propia página web, y en 2015 cuando consiguió su primer gran contrato con T-Mobile.
Un superventas a nivel global
Desde entonces, los PopSockets han crecido exponencialmente en ventas y popularidad. En 2017, se vendieron 35 millones de unidades; en 2018, 60 millones; y en 2019, se superaron los 100 millones.
Los PopSockets han sido adoptados por celebridades, influencers, deportistas y personas de todo el mundo, que los usan por su practicidad, su comodidad y su estilo.
Además, los PopSockets han demostrado tener un impacto positivo en la salud de las manos y las muñecas, al prevenir lesiones como el síndrome del túnel carpiano o la tendinitis.
No todo es positivo con los PopSockets
A pesar de su éxito, los PopSockets también tienen algunos inconvenientes. Por ejemplo, su precio es más alto que el de otros accesorios similares, su compatibilidad con algunas fundas o dispositivos es limitada, o su diseño puede resultar poco discreto o elegante para algunos gustos.
Por eso, hay personas que prefieren buscar otras alternativas a los PopSockets, que cumplan las mismas funciones, pero con otras características. Algunas de las alternativas más populares a los PopSockets son:
- Los anillos para móviles: Son unos anillos metálicos que se pegan a la parte trasera del teléfono o de la funda, y que sirven para sujetar el teléfono con más seguridad o para usarlo como soporte. Se pueden girar 360 grados y hay varios modelos y colores disponibles.
- Las correas para móviles: Son unas tiras de tela o plástico que se pegan o se enganchan al teléfono o a la funda, y que sirven para sujetar el teléfono con el dedo o con la mano.
- Los soportes plegables: Se pegan al teléfono o a la funda, y se pueden desplegar para usarlos como soporte o como agarre. Tienen un diseño más discreto y compacto que los PopSockets.
Estas son solo algunas de las alternativas a los PopSockets que existen en el mercado. Lo importante es que los accesorios para móviles no solo sirven para mejorar la estética, sino también para mejorar la funcionalidad y la salud de los dispositivos y de las personas que los usan.
